Además de ese dominio de la época mencionada, el autor posee una magnífica capacidad para la narrativa, que mantiene al lector pegado a las páginas del libro sumergido en la historia. Sus descripciones son precisas, claras y te dibujan el entorno con todo lujo de detalles. Los sentimientos, odios y reacciones de cada personaje también están expresados de manera genial. A la vez que lees, odias, te compadeces, simpatizas, luchas, construyes,...todo un torrente continuo de emociones.
Ken Follett |
Es un libro extenso (1073 páginas) pero que engancha y se lee fácil desde el principio. Es como estar viendo una película. De hecho a medida que lo leía visualizaba la película que, muy posiblemente, se realizará en un futuro. La acción se desarrolla de manera trepidante y ya desde el principio comienzas a amar u odiar a los diversos personajes según sus acciones en la trama. Aunque la historia principal gira en torno a tres personajes protagonistas que centran la trama de la obra:
- Edgar, un constructor de sólidos principios morales y con la habilidad de construir todo aquello que se le ocurra, desde un barco hasta una iglesia o un canal. Es justo y fiel y detesta a los poderosos sin escrúpulos.
- Ragna, una noble normanda que se casa con un conde inglés y donde debe demostrar su estatus de noble condesa rodeada de personajes hostiles y extraños que no le harán la vida nada fácil. Sabe manejar al pueblo pero antepone la justicia a cualquier otra consideración.
- Aldred, un monje ávido por el saber y los libros que es continuamente boicoteado por haberse enfrentado a los ricos y poderosos corruptos de la ciudad de Shiring.
A lo largo de las páginas seguimos la evolución de sus vidas entrecruzadas, con sus sufrimientos, desencantos, pequeñas alegrías, triunfos,...todo ello para dar lugar a una historia amena, interesante y muy real. Libro muy recomendable para pasar muy buenos ratos y aprender sobre historia medieval.